Compartiendo desde el corazón y guiados por la sabiduría eterna, nos sumergimos en conversaciones que transforman el alma. Katherine, nuestra invitada especial de República Dominicana, nos ilumina con su testimonio sobre la espera activa, apoyada por la paciencia y la fe, descubriendo en el libro de Habacuc la certeza de que las promesas divinas se materializarán en el tiempo perfecto de Dios. Las Escrituras se entrelazan con nuestras vidas, marcando un sendero hacia la verdadera plenitud y las bendiciones que emergen de desear lo que Dios tiene preparado para nosotros.
En los momentos de incertidumbre, la fe es nuestro faro, proporcionando la fortaleza necesaria para avanzar con confianza y ver más allá de lo inmediato. El Salmo 18 resuena en este episodio como un recordatorio de la perfección en el camino de Dios, y cómo el abrazar su voluntad puede transformar la ansiedad en paz y la espera en paciencia. La música, en este caso a través de la canción "Lo único que quiero" de Abel Zavala, se convierte en una expresión armoniosa de nuestro anhelo por alinear nuestros corazones con el latir del propósito divino de Dios.
Cerramos con una reflexión personal sobre la lucha contra la ansiedad y cómo el proceso de confiar en Dios nos enseña a vivir el presente con esperanza. La entrega y la pasión por Dios no es solo un ideal a alcanzar; es una práctica diaria que nos invita a vivir en su presencia, respondiendo al amor divino con cada acción y cada pensamiento. Este episodio es un llamado a transformar la espera en adoración, y la ansiedad en un acto de paz constante.
Compartiendo desde el corazón y guiados por la sabiduría eterna, nos sumergimos en conversaciones que transforman el alma. Katherine, nuestra invitada especial de República Dominicana, nos ilumina con su testimonio sobre la espera activa, apoyada por la paciencia y la fe, descubriendo en el libro de Habacuc la certeza de que las promesas divinas se materializarán en el tiempo perfecto de Dios. Las Escrituras se entrelazan con nuestras vidas, marcando un sendero hacia la verdadera plenitud y las bendiciones que emergen de desear lo que Dios tiene preparado para nosotros.
En los momentos de incertidumbre, la fe es nuestro faro, proporcionando la fortaleza necesaria para avanzar con confianza y ver más allá de lo inmediato. El Salmo 18 resuena en este episodio como un recordatorio de la perfección en el camino de Dios, y cómo el abrazar su voluntad puede transformar la ansiedad en paz y la espera en paciencia. La música, en este caso a través de la canción "Lo único que quiero" de Abel Zavala, se convierte en una expresión armoniosa de nuestro anhelo por alinear nuestros corazones con el latir del propósito divino de Dios.
Cerramos con una reflexión personal sobre la lucha contra la ansiedad y cómo el proceso de confiar en Dios nos enseña a vivir el presente con esperanza. La entrega y la pasión por Dios no es solo un ideal a alcanzar; es una práctica diaria que nos invita a vivir en su presencia, respondiendo al amor divino con cada acción y cada pensamiento. Este episodio es un llamado a transformar la espera en adoración, y la ansiedad en un acto de paz constante.
Speaker 1:
Muy buenos días a todos y bienvenidos a mi podcast de nuevo, episodio 2. Esta mañana tenemos a Katherine conversando con nosotros. Escogimos un tema muy especial el tiempo de Dios en nuestra vida y cómo Dios opera a través de ese tiempo. En el podcast pasado hablamos acerca de cómo Dios nos encuentra y cómo Dios está esperando por nosotros para que nosotros podamos seguir su camino. En este podcast quiero enfocarme más en la parte de la espera de lo que Dios quiere para nosotros. Muchos de ustedes saben que la espera es algo muy difícil de hacer. Nosotros nos desesperamos, queremos hacer las cosas a nuestro tiempo, queremos de alguna forma hacerlo a nuestra manera, pero cuando nosotros entendemos que debemos esperar en Dios todas esas cosas, todas esas bendiciones, ese tiempo que nosotros estamos en espera se hace como realmente no tan largo, sino que llega en el momento adecuado, en el momento perfecto. Entonces tenemos aquí a Catherine. hoy le damos la bienvenida a Catherine de República Dominicana. En estos días hemos podido conversar acerca de eso, de ese tiempo y cómo Dios actúa en el tiempo adecuado.
Speaker 2:
Amén. Gracias, edgar, muchísimas gracias una vez más por tomarte este tiempo para poder tratar este tema tan importante. Qué bueno que otra vez hemos podido conectar para llevar a toda la audiencia que te escucha poder llevar esta palabra de Dios para que sea de bendición para sus vidas. Para sus vidas Estuve leyendo en el libro de Abacut, capítulo 2, versos del 2 al 3, a los que tienen sus Biblias allí pueden buscarlo o pueden escucharlo que lo voy a estar acá mencionando y dice así y Dios me respondió voy a darte a conocer lo que está por suceder. Tardará un poco en cumplirse, pero tú no te desesperes. Aún no ha llegado la hora de que todo esto se cumpla, pero puedo asegurarte de que se cumplirá sin falta. Y es precisamente de eso, de las cosas que se han de cumplir en el tiempo de Dios, y yo sé que Dios tiene promesas para nosotros.
Speaker 2:
Dios al plan que Dios tenga para cada uno de nosotros. Lo que sí te puedo exhortar en esta mañana o en el tiempo en que estés escuchando este podcast en horario diferido, es que el tiempo de Dios es perfecto. No va a ser en tu tiempo, no va a ser en mi tiempo, no va a ser en el tiempo de Edgar, sino en el tiempo perfecto de Dios Y no debemos desesperarnos. No es fácil estar a la espera, por decirlo así, pero confiamos en un Dios vivo, confiamos en un Dios que cumple y cuando nosotros aprovechamos ese tiempo de la espera para edificarnos y darle ese tiempo a Dios y trabajar nuestras vidas y lo que Dios quiere que hagamos con ella, en las cosas y en los asuntos de Dios, entonces Dios se glorifica y Él quiere que en ese tiempo que estamos esperando, lo podamos invertir en los asuntos de él, así que no llega ni tarde ni temprano. Él llega justo a tiempo. No debemos de perder ese enfoque ni descuidarnos, y siempre saber que sus promesas son sí y amén.
Speaker 1:
Wow, definitivamente una explicación bastante hermosa. Sabes, mientras que hablabas, yo no sé si has visto esas fotos donde hay un camino, el camino de Dios y el camino del mundo, se le puede decir, y los dos caminos te llevan a un lugar y por lo general está el paraíso y en el otro está el infierno. Pero mientras que tú hablabas, yo vi ese camino, uno en el tiempo de Dios y el otro en el tiempo del hombre. Cuando nosotros pasamos por ese camino de Dios, ese tiempo de Dios, perdón, nosotros reconocemos que queremos lo que Dios quiere para nosotros. Y me hace recordar Romanos 12, 2, que dice que el plan de Dios para nosotros es bueno, es agradable y es perfecto.
Speaker 1:
Pablo habla sobre la renovación de nuestra mente, la renovación que Dios quiere para nosotros, para nuestras vidas, para nuestros seres queridos, para nuestros amigos, esas personas que están buscando una respuesta o están buscando un encuentro con Dios. Lo pueden encontrar, pero eso toma paciencia Y creo que Dios, él, nos ayuda en el transcurso. En el transcurso de ese tiempo, uno de mis pastores me dijo algo cuando yo estaba pasando por una temporada muy difícil de mi vida, y me dijo Dios va a caminar contigo en esta temporada. Y, aunque sucedió mucho tiempo atrás, todavía siento que Dios está caminando a través de ese camino conmigo Y me llena de alegría. ¿sabes Porque, aun cuando pasamos temporadas difíciles, cuando pasamos temporadas que podemos creer que no hay una respuesta, dios está ahí con nosotros para empujarnos, para llevarnos, cuando comenzamos a enfocarnos a las cosas que nosotros queremos para nosotros mismos.
Speaker 1:
Sí, hay tiempos y hay etapas que vamos a pasar, y esas cosas no son malas. Eso también hace parte de nuestro crecimiento, esas metas que nosotros tenemos. Pero algo sucede cuando nosotros ponemos esas metas en las manos del Señor, ya, esas cosas no se vuelven tantas como ok, quiero cumplir esto, sino que yo sé que Dios me está ayudando en el proceso a poder llegar a esa meta específicamente, Buenísimo.
Speaker 2:
Wow, no hay duda de que Dios se encarga de todos esos planes, de todos esos proyectos, siempre y cuando se los pongamos en sus manos, porque no depende de nosotros. La palabra de Dios dice en Juan 15, 5 que nosotros somos los pámpanos y Dios es la vid. O sea que nosotros, fuera de Él, nada podemos hacer, o sea que todo depende de Él y no de nosotros, pero sí tenemos que ponérselo en las manos de Dios y decirle a Dios, yo quiero hacer los planes que tú quieres para mí Y así como tú empezaste con el Salmo 37.4, que dice deleítate en el Señor y Él te concedera esas peticiones que son conformes a nuestro corazón. Hay una condición, y es que antes de eso tenemos que deleitarnos en el Señor, y tú supieras que normalmente se dice mucho cuando uno cumple años que Dios conceda los deseos de tu corazón.
Speaker 2:
Que Dios conceda los deseos de tu corazón, o sea como que esa parte se repite. Pero hay una primera parte antes de eso, y eso viene de ahí, eso viene de la palabra, es cuando nos deleitamos en los deseos de Dios, porque Dios quiere hacer su voluntad en nuestras vidas y para hacer su voluntad en nuestras vidas, nosotros tenemos que caminar en su voluntad, tenemos que anhelar lo que él anhela, tenemos que desear lo que él desea. Y cuando él entonces sabe que nosotros estamos caminando ahí, porque él mismo es quien produce en nosotros ese gozo, entonces como ya vamos a estar alineados al deseo y al corazón de Dios, entonces él va a conceder eso porque nuestros deseos y nuestros anhelos van a estar anhelando y queriendo lo que Dios quiere para nosotros. No va a ser como, cuando lo pedimos, pidiendo cosas para nuestros propios placeres o deleites, en la palabra que dice que ustedes piden pero no reciben. Y no reciben porque piden mal, porque piden conforme a sus deseos y no conforme a los deseos de Dios. Entonces esa es una de las razones por las cuales no recibimos.
Speaker 2:
Entonces, cuando sí estamos anhelando lo que Dios anhela y nos deleitamos en lo que Dios quiere, pues entonces ahí el Señor sí nos concede esas peticiones de nuestro corazón, porque están señalando esa voluntad de Dios. Y también voy al pasaje rapidito en Isaías 43.2, que dice lo siguiente aunque tengas problemas, aunque tengas graves problemas, yo siempre estaré contigo. Cruzarás ríos y no te ahogarás, caminarás en el fuego y no te quemarás, porque yo soy tu Dios y te pondré a salvo. Yo soy el Señor, dios Santo de Israel.
Speaker 2:
Tú mencionabas esa parte de que, en ese momento de tu vida, cuando el pastor te te dijo que el Señor no te iba a sacar de esa situación, pero que Él caminaría contigo, me vino a la mente este pasaje y que los tenía aquí.
Speaker 2:
Lo busqué rapidito y dije wow, este pasaje está ahí mismo, claramente diciendo vas a tener que pasar por esa situación porque tienes que aprender la prueba Y la fe tiene que ser probada. ¿por qué voy a estar caminando contigo? Porque el Señor está interesado en cambiar nuestra condición, no en cambiar la situación que está alrededor. Recuerden que la situación a nuestro alrededor es el instrumento que Dios utiliza para cambiar la condición de nuestro corazón, porque si esos problemas no vienen y no están ahí, entonces no va a haber un cambio profundo en nuestras vidas, que es lo que Dios anhela. Y que siempre estemos dependientes de Él, porque sin Él nada somos y sin Él nada podemos hacer. Así que gracias porque has estado en el punto clave de lo que Dios quiere hacer con nosotros en medio de esos problemas y situaciones Y siempre. Eso nos confirma aún más que el tiempo de Dios es perfecto, porque todo llega en su justo momento.
Speaker 1:
Guau, wow, definitivamente es hermoso todo lo que has dicho y espero que esas personas que nos estén escuchando en este podcast puedan también reflexionar ese punto donde nos estamos desesperando, pero que realmente no los debemos desesperar porque, como tú lo dijiste, el tiempo de Dios es perfecto, es bueno, es agradable y no debemos desesperar porque, como tú lo dijiste, el tiempo de Dios es perfecto, es bueno, es agradable Y no debemos desesperarnos. Mira cuando tú dijiste en Salmos 37.4, deleítate en el Señory, él concederá los deseos de tu corazón. Llegué al versículo 7, que dice guarda silencio ante el Señor y espera en Él con paciencia. Dice guarda silencio ante el Señor y espera en Él con paciencia. Y mi gente, eso es algo que nos cuesta hacer, especialmente la paciencia, esperar pacientemente. Pero Dios nos anima a que debemos guardar silencio ante el Señor y esperar en Él con paciencia. Muchas veces por eso tomamos decisiones que no debemos tomar. A veces vamos a lugares donde no debemos ir. Hay un versículo bíblico donde dice que Jesús fue enviado al desierto por el Espíritu Santo. A veces nosotros vamos al desierto por nuestras propias decisiones y a veces vamos al desierto llevados por el Espíritu Santo.
Speaker 1:
Las dos opciones tienen un resultado totalmente diferente, pero cuando nosotros comenzamos a tener paciencia en el Señor, comenzamos a enfocarnos en su palabra, comenzamos a deleitarnos en los planes que Dios tiene para nosotros, comenzamos, nosotros, a ver lo que Dios quiere para nosotros, lo que Dios tiene para nosotros, esas cosas lindas que a veces no vemos en el momento, porque sabemos que lo queremos ya. Pero Dios comienza a demostrarnos, a través de su palabra, lo bello que es Él, lo bello que es el tiempo en la espera, Lo bello que es estar en su presencia y decirle Señor, a mí no me importa cuánto tenga que esperar, pero quiero tu voluntad en mi vida. Yo no quiero hacer nada que salga fuera de tu voluntad. No-transcript.
Speaker 1:
En Hebreos 11, uno dice ahora bien, la fe es tener la confianza en lo que esperamos, es tener la certeza de lo que no vemos. Entonces, ahí es donde se activa la fe, la paciencia, el amor. Ya, a nosotros no nos importa lo que nosotros queremos, sino nos importa lo que Dios tiene para nosotros. Esos anhelos que Dios tiene para nosotros se convierten en nuestros anhelos. Y por eso es muy importante tener la fe en el medio de la espera, porque la fe activa la confianza de lo que esperamos Y es tener la certeza que, aunque no lo veamos todavía, sabemos que está ahí. Es cuestión de fe, esperanza y paciencia.
Speaker 2:
Amén, me encantó eso que mencionaste, muy, pero muy bueno. Los anhelos de Dios van a ser nuestros anhelos. Y también aquí tengo hablando del tiempo perfecto de Dios para nuestras vidas. Vengo hablando del tiempo perfecto de Dios para nuestras vidas En el Salmo 18, los versículos del 30 al 34, que dice El camino de Dios es perfecto. Las promesas del Señor han sido probadas. Él protege a quienes buscan su ayuda y protección. El Señor es el único Dios. Nuestro Dios es la única roca. Dios es quien me reviste de valor y perfecciona mi camino. Él me da pies como los de la sierva y me mantiene firme aún en los lugares más altos. Dios me prepara para la guerra. Les da la fuerza a mis brazos para lanzar dardos poderosos. Dios mío, me has dado el escudo de tu salvación. Ahí, continué Hacia el verso 35. Has sido mi apoyo y me has ayudado a prosperar. Gloria a Dios.
Speaker 2:
Wow, todo esto que estamos leyendo de la palabra de Dios y viendo cómo el Señor también nos prepara para la espera. Yo puedo decirles que cuando uno espera en el Señor el tiempo perfecto, esa espera se vuelve deleitosa, o sea que no es una espera agobiante, no es una espera desesperante, no es una espera que tú estás como que ay, ¿cuándo va a suceder, ¿qué va a pasar, ¿cómo será? y mira que no veo el tiempo y que la cosa no llega, o esto no se da. No, sino que en esa preparación y en ese caminar de Dios y en esa espera, mientras tú vas haciendo lo que Dios quiere que tú hagas y siguiendo sus propósitos, el Señor va a ir preparando ese corazón que, cuando llegue lo que tenga que llegar tú ni cuándo te vas a dar va a decir oh, pero míralo, aquí tú estabas realmente esperando eso. Y dice aquí llegó el tiempo aceptable del Señor para mí, lo que Él me había prometido, lo que Él me había dicho o lo que yo estaba esperando.
Speaker 2:
Pero tú estabas en ese camino, deleitándote, haciendo la voluntad de Dios y enfocándote en sus propósitos y en sus caminos.
Speaker 2:
Y como dice una canción de Abel Zavala que se llama Lo único que quiero, dice Dios mío, yo quiero corresponder al amor que tú me das, quiero amarte de verdad en mi caminar diario Y cuando tú regreses me encuentres haciendo tu voluntad.
Speaker 2:
No dejes que mi vida se desperdicie en cosas que la pena no valdrán, afanes ya, no más, sino que cada día aplique tu palabra en mi forma de pensar, mi diario caminar, así como tú mencionabas más temprano. En mi país decimos ahorita, refiriéndose como más atrás o más adelante el tiempo, en Romanos 12.2, que tú decías que el Señor renueve mi mente Y aquí dice aplique tu palabra en mi forma de pensar o sea que Él renueve nuestra mente cada día, porque van a venir esos dardos de fuego del enemigo, donde van a haber pensamientos, palabras inadecuadas y cosas que van a desanimarte. Pero cuando tenemos ese enfoque en nuestro diario caminar de renovar nuestra mente y de pensar en ese camino de Dios, para nosotros entonces todo se vuelve más placentero. Y también en un verso que dice que lo mencionábamos en el podcast anterior, que les invitamos a que lo puedan escuchar un testimonio hermoso con tres hermanos maravillosos, hermoso con tres hermanos maravillosos, y vayan a verlo. Lo vamos a dejar eso ahí para que tengan esa curiosidad y puedan ir hacia allá.
Speaker 1:
Sabes, yo creo que debemos de leer Romanos 12, porque hay una verdad increíble a través de ese versículo, y creo que está muy. El versículo 12 se liga mucho a Salmos 37.4. Mira lo que dice Romanos 12.2. No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cómo es la voluntad de Dios buena, agradable y perfecta. Y mientras que yo leo este versículo, catherine, llego a pensar que cuando nosotros comenzamos a renovar nuestra mente todos los días porque dice que todos los días debemos renovar nuestra mente nuestras formas de querer algo, de la espera se vuelven parte de Dios O sea. Esas cosas que nosotros queremos ya no las vemos como algo que queremos, sino que queremos la voluntad de Dios en nuestras vidas. Por eso la palabra dice que deleítate en el Señor y Él te concederá los deseos de tu corazón. Yo creo que, mientras que nosotros renovemos nuestra mente, nosotros ya no vamos a pedir como la carne pide, sino que, como el espíritu que vive adentro de nosotros va a pedir como la carne pide, sino que como el Espíritu que vive adentro de nosotros va a pedir. Y hay algo muy importante que también quería comentar, y es que cuando nosotros esperamos en el Señor, no significa que vamos a estar con los brazos cruzados.
Speaker 1:
Creo que nosotros también tenemos que hacer nuestra parte y en el medio de la oración, en medio de la espera, confiar en Dios. Pero también nosotros debemos de actuar en fe, porque obviamente Dios no va a hacer todo. Él lo puede hacer, pero también Él va a trabajar en nosotros a través de esa espera. No podemos esperar que tener los brazos cruzados y luego esperar que Dios te haga todo el trabajo. No, dios nos ayuda a empujarnos a que también nosotros actuemos en fe, a que nosotros podamos caminando y tomando pasos de fe. Hay algo también muy importante que debemos recordar, y es que un día para Dios es como mil años, y mil años es como un día, así que a veces nosotros queremos todo nuestro tiempo ignorando de que Dios ya está trabajando algo, pero que su tiempo también es diferente al de nosotros.
Speaker 2:
Buenísimo Wow. De verdad que ¿cuánto tenemos que aprender nosotros del Señor? verdad que ¿cuánto tenemos que aprender nosotros del Señor que el Señor nos pueda encontrar haciendo su voluntad cada día, y no me refiero en este momento, cuando Él venga, sino que tenemos que saber y entender y tener siempre presente en nuestra mente que cada paso que nosotros damos, lo estamos haciendo frente al rostro de Dios, porque Él está en todas partes. el Señor es omnipresente, él todo lo ve, omnisciente, todo lo sabe, todo lo conoce tengo una pregunta para ti.
Speaker 1:
¿en algún momento te has sentido desesperada? ¿o en algún momento no has confiado en el plan de Dios para ti?
Speaker 2:
muy buena pregunta, edgar. Mira, yo he luchado en mucho tiempo de mi vida con la ansiedad. Eso es algo en lo que el Señor ha estado trabajando en mí, y no te digo que es desesperada por cosas que no se dan, sino más bien por cosas que a veces uno teme que se puedan dar. Y me da ansiedad de que esas cosas que uno teme que puedan suceder pues vayan a darse. Tú sabes que la ansiedad es anticiparse a lo que no ha sucedido. Y yo he aprendido, en el transcurso del tiempo y en estas pruebas que el Señor a mí me ha dado, que yo no debo de tener ansiedad por cosas que no han sucedido, porque Dios es quien tiene el control, él es el que domina y Él es el que sabe por qué pasan todas las cosas. Si el Señor nos ha prometido, a cada uno de nosotros, muchas promesas, que la podemos encontrar en la palabra de Dios, y a los que no saben cuáles son esas promesas que Dios nos ha dado, pueden buscar hasta en Google, pueden escribir promesas de Dios en la Biblia y ahí le van a aparecer muchos versículos bíblicos de todo lo que el Señor promete a todas las personas que han creído y han puesto su confianza en Él. Entonces, en ese sentido, edgar, puedo decirte que realmente no me he desesperado por cosas que el Señor me ha dicho que sucederán, sino que he podido aprender a esperar en Él en su tiempo, en que las cosas lleguen en su momento. Y he pod desesperación en que no ha llegado lo que el Señor ha prometido, sino más bien por cosas que yo temo que pasen, que me he anticipado y he puesto a mi mente en preocupación por cosas que no se han dado Por ejemplo, te puedo decir, enfermedad de algún familiar que Dios libre mal. Cosas que a veces uno piensa y se preocupa ahí mismo, como la palabra lo dice, preocuparse de cosas que no han sucedido. Entonces eso nos lleva a nosotros a desenfocarnos y a pensar que tenemos el control de alguna cosa.
Speaker 2:
Eso sí, por la gracia de Dios, el Señor lo ha ido trabajando en mí y yo he ido dejándole en las manos de Dios esas cosas, y el Señor me ha ayudado a descansar en él. Y aquí, si les puedo mencionar el versículo bíblico de Isaías 26, 3, 3 al 4, que si se los mencionábamos en el podcast pasado, que aquí les doy esa pincelada y este verso de verdad que me ha ayudado bastante Tú guardarás en perfecta paz a todos los que confían en ti, a todos los que concentran en ti sus pensamientos. Confíen siempre en el Señor, porque el Señor Dios es la roca eterna. Con súplicas y ruego, dejen sus oraciones delante de mí y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
Speaker 2:
Y que lindo que el Señor pone ese orden donde dice ok, dame gracias, tenemos que ir a Dios con acción de gracias. Y entonces luego te dice y trae tus peticiones, déjamelas ahí. Ya, después que tú descargas tus peticiones delante de Dios, él se va a encargar. O sea, déjale esa petición que te preocupa al Señor y vete con paz, porque ya tú se lo depositaste en su confianza y Él se va a encargar de eso. Él te dice déjame eso ahí en su confianza y él se va a encargar de eso.
Speaker 1:
Él te dice déjame eso ahí. Así es, katherine. Muchísimas gracias por esa respuesta. Yo estoy muy seguro que alguien puede identificarse contigo en todo lo que estás diciendo en este podcast en esta mañana. Y ¿sabes, mientras que tú hablabas sobre eso, a mí me llegó a la mente Mateo 6.25, que habla también sobre la preocupación. Yo creo que la preocupación también va de la mano con la paciencia. A veces, en el medio de la paciencia, nos podemos desesperar y también nos podemos preocupar. Pero en Mateo 6.25, dios nos explica que no debemos preocuparnos, sino que debemos más confiar en Él y debemos poner toda nuestra confianza en los planes que Dios tiene para nosotros.
Speaker 2:
Amén.
Speaker 2:
Eso es ocuparnos en esos propósitos de Dios.
Speaker 2:
Por eso, de verdad que es un ejercicio bello, porque el Señor nos ayuda a nosotros tanto, tanto, tanto, porque el Señor nos ayuda a nosotros tanto, tanto, tanto de que en esa paciencia, en esa espera, en vez de desesperarnos, puede venir entonces ansiedad, preocupación Por cosa que estamos poniendo ahí, porque el ser humano, o sea el hombre natural, siempre va a tener una situación con la cual lidiar, y es parte de cómo el Señor va formando en nuestras vidas ese fruto del espíritu que es gozo, paz, paciencia, benignidad, amor, mansedumbre, templanza, que templanza es lo mismo que dominio propio, y podemos entonces así poder cultivar en nosotros ese carácter del Espíritu en nuestras vidas.
Speaker 2:
O sea que, de verdad, que la palabra de Dios no viene vacía en nuestras vidas, sino que siempre está haciendo algo para moldear cualquier área de nuestras vidas en donde lo estemos necesitando. Entonces ahora, edgar, a ti, yo te quiero hacer también una pregunta, en este tiempo que tienes caminando con el Señor en todo ese transcurso, y a propósito del tema que estamos tratando hoy, que es el tiempo de Dios es perfecto. El tiempo de Dios es perfecto.
Speaker 1:
Me gustaría saber y también que arrojes luz a la audiencia que te escucha Qué ha sido lo más difícil que te ha tocado tratar y cómo lo has tratado en este tiempo de caminar con el Señor. Wow, bueno, mira, yo no siempre fui un amigo de la paciencia. Yo antes actuaba con desesperancia al tomar decisiones. De hecho, yo era una persona en la cual si yo quería algo, la quería. Ya, no era una persona en la cual yo esperaba, pero a transcurso del tiempo y mi crecimiento con Dios, jesús me fue enseñando cómo esperar en Él, cómo tener paciencia hacia ÉlY también me enseñó cómo enfocarme en lo que Él quería para mí. Cuando nosotros tenemos un enfoque específico en las cosas que Dios quiere hacer en nosotros, se nos va a ser mucho más fácil poder caminar en fe, poder caminar con ese punto y verlo y saber que queremos ir ahí. La fe, la paciencia van a ser tus mejores amigos en ese momento, porque van a haber etapas en tu vida donde no vas a sentir que las cosas están marchando de acuerdo a lo que tú quieres.
Speaker 1:
Dios siempre va a trabajar detrás de escena, aunque tú no lo veas. Entonces eso fue primordialmente un reto para mí, porque yo siempre he sido la persona que quiere algo en el momento y me desesperaba si no lo tenía. Pero Dios fue trabajando en mi corazón, fue trabajando en mi mente. Utilicé las cosas buenas que Dios ya tenía adentro de mí, que Dios ya había puesto adentro de mí, y las fui utilizando para bien. Lo utilicé, para que Dios creciera mi paciencia en las cosas, ya sean materiales, espirituales, trabajo, cosas físicas que Dios pone en nuestros corazones. Pero fue un proceso.
Speaker 1:
Lo que es más importante es que tengamos la paciencia. Todo va a tomar paciencia, todo tiene una espera Y Dios va a ir moldeándote también a ti. Va a ir así como lo hizo por mí. Yo, una vez más, no fui la mejor persona en espera. Yo siempre quería las cosas en mi tiempo, pero no, dios fue enseñándome, dios fue moldeándome, dios fue cambiando esa desesperanza en mí.
Speaker 1:
Ahí es cuando ves los frutos del Espíritu, la templeza, el amor, ¿cierto? Y enamorarte del tiempo que estás pasando, toda cosa que estemos experimentando. Debemos enamorarnos de ese tiempo, porque si Dios nos dio ese tiempo específico, es por algo es para que nosotros también aprendamos de nosotros, aprendamos de lo que Él quiere enseñarnos Y, a transcurso de eso, tú vas a ver que hay frutos detrás de cena. Es como cuando estás regando una planta, ¿ok? Y tú pones la semilla y tú le echas agua. La semilla no va a dar fruto en un día. La semilla toma un proceso. La semilla no va a dar fruto en un día. La semilla toma un proceso. La semilla comienza a crecer, saca sus tallitos, susarnos el tiempo. Debemos reflejar a Cristo a través de esa temporada, demostrar la paciencia, y eso es una vez más algo que no nos gusta hacer. Pero espero que eso haya respondido tu pregunta.
Speaker 2:
Buenísimo. Me encantó esa parte que mencionaste Cómo Dios utilizó en ti para bien Y cómo tú pudiste poner en práctica para bien Lo que antes tú utilizabas al momento de desesperarte, que lo querías ya. Cómo esas fortalezas en tu vida, ubicadas en el propósito adecuado de Dios y en la justa medida para el bienestar de tu crecimiento espiritual, como tú lo usaste entonces con un enfoque apropiado para tu crecimiento espiritual y eso entonces dio un fruto mayor para tu paciencia. Así mismo, como tú quer quieres antes tener las cosas, ya tú entonces practicar la paciencia. Esa fortaleza en hacer las cosas en el momento también te sirve como fortaleza para tú, entonces aprender y modelar esa paciencia para que pudiera entonces venir a avanzar por esa vía. De verdad que ese crecimiento es exponencial, avanzar por esa vía. De verdad que ese crecimiento es exponencial cuando llevamos esas fortalezas en el enfoque correcto. ¡qué lindo.
Speaker 1:
Quiero terminar con esto Y, por favor, a esas personas que nos escuchan, a esas personas que han pasado por momentos difíciles de su vida donde han tenido que reflejar paciencia, yo te digo esta mañana, esta tarde, esta noche, cuando me estés escuchando, que Dios nunca se ha olvidado de ti Y, aunque estés pasando por ese desierto, el Espíritu Santo está contigo. Dios está contigo, jesús está contigo. No te desesperes. Sigue teniendo fe en Cristo, que Él va a hacer lo que te prometió que iba a hacer. No te desesperes, ponte metas, ten paciencia, respira y recuerda lo último que Dios dijo acerca de tu temporada y a dónde te iba a llevar. Termino con eso, catherine. ¿tienes Abel Zavala? Lo único que quiero.
Speaker 2:
Dios mío, yo quiero corresponder al amor que tú me das. Quiero amarte de verdad en mi diario caminar y cuando tú regreses me encuentres haciendo tu voluntad. La entrega y la pasión en ti yo quiero en mí tener y cada día esforzarme por tu amor corresponder. Soy de ti, dios mío. Yo quiero corresponder al amor que tú me das. Quiero amarte de verdad en mi diario caminar y cuando tú regreses me encuentres haciendo tu voluntad. Recuerda que ese regreso del Señor también se refiere a que cada día vivimos frente al rostro de Dios. Gracias por ver el video.
